Debes tener la mentalidad adecuada para ganar y obtener resultados de 10 en tus finanzas personales. Es importante distinguir y aprovechar las oportunidades para obtener el dinero. No he conocido a nadie que se moleste por tener o recibir dinero.
Aristimuño Herrera & Asociados y Héctor Gonzalez Díaz-Barreiro
Pero sí he conocido a mucha gente que no le gusta hablar del dinero o que le parece un tema impropio. He conocido a no pocas personas que me dicen que el dinero es algo que no les importa, que su mente está en cosas ‘superiores’. El dinero y los mitos En nuestra cultura, el desdén por el dinero es considerado como una virtud: los pobres son bondadosos y los ricos avaros o injustos. ¿Quién no ha escuchado expresiones como ‘cochino dinero’, ‘pobre pero honrado’ o ‘más tiene quien menos necesita’?
Ante esos antecedentes es necesario hacer un cuestionamiento de nuestra forma de pensar y relacionarnos con respecto al dinero. Si bien es cierto que el dinero no puede ser tomado como un fin en sí mismo, no cabe duda que es el medio para conseguir muchas de las realizaciones personales en todos los ámbitos, por lo que hay que quitarnos las ideas que nos generen confusión respecto a la importancia de buscarlo.
En fechas recientes ha tenido bastante éxito un libro y un video titulados El Secreto y una de sus principales recomendaciones es el tener la convicción de que el dinero realmente nos llegará. No es que vaya a ocurrir por arte de magia, sino que pasará lo mismo que cuando vamos a comprar un determinado modelo de auto: empezamos a ver ese modelo por todos lados, igual pasará con el dinero, empezaremos a ver las oportunidades de obtenerlo.
Pero ese pensamiento nos permitirá también ir borrando muchos ‘frenos’ subconscientes que posiblemente nos hacen creer que no podemos ser ricos: pensar que la posición económica es heredada irremediablemente, o que no se cuenta con los estudios o la experiencia adecuada, o que sólo con corrupción se hace dinero.
Liberarnos de esos frenos y contar con la convicción de que podemos conseguir y disfrutar el dinero es una condición básica para el éxito financiero.
Tienes que crearlo
Esta segunda clave es sumamente importante. Proviene de entender que el dinero representa el valor que alguien estuvo dispuesto a pagar por algo.
Si lo que hacemos tiene un gran valor, conseguiremos mucho dinero y al revés, si lo que hacemos tiene poco valor, el dinero que conseguimos será modesto.
Bajo esta perspectiva, crear dinero implica el hábito de generar valor en todo lo que hacemos, pero particularmente en el trabajo, ya sea como empresario, emprendedor o empleado: no basta un trabajo bien hecho, hay que asegurarnos que sea valioso para quien va a recibir el servicio o producto, de manera que esté dispuesto a pagar más de lo normal, llámese en precio pagado, frecuencia de compra, sueldo o crecimiento laboral.
Y como el valor es siempre algo percibido, necesariamente hay que saber vender, no importa el ámbito en el que uno se mueva: producción, servicios, investigación, educación, etcétera, en cualquiera de ellos hay que saber vender para que ese valor que generamos sea percibido por el cliente. Quien no sabe ser un buen vendedor, difícilmente creará dinero.
Respétalo
“El dinero es celoso, si no lo cuidas, se va con otro” dice un viejo refrán popular que expresa una gran paradoja: con frecuencia nos esforzamos mucho por obtener dinero pero luego somos muy poco cuidadosos para manejarlo. Y no nos referimos al hecho de ahorrar o tener un presupuesto, sino simplemente al cuidado más inmediato del efectivo y del dinero en sí.
Cuando nos damos cuenta de que el dinero es la representación de un valor generado y por lo tanto lo respetamos incluso físicamente, estamos preparando nuestra mente para aprovecharlo de la mejor manera.
Una cartera con billetes bien ordenados refleja el respeto y cuidado que se le tiene al dinero.
Quien sabe organizar su dinero en distintas cuentas bancarias para diferenciar sus tipos de gastos o quien sabe revisar con frecuencia los estados de cuenta para identificar cada entrada y cada salida es, sin duda, una persona que sabe respetar su dinero.
El respeto al dinero se refleja también en saber cobrar lo que nos corresponde y pagar cumplidamente las deudas que adquirimos.
La persona que sabe respetar el dinero está en las condiciones adecuadas para tener la mentalidad de aprovecharlo e incrementarlo.
Enfócalo
La experiencia inicial con el uso del dinero para la mayor parte de las personas es recibirlo de los padres y usarlo para comprar sus gustos. Más adelante pasan a ganar con su trabajo y utilizarlo para cubrir las necesidades básicas. Llamémosle esquema básico de ingreso-gasto.
Pero la verdad es que no son pocas las personas que se quedan permanentemente en ese esquema básico sin evolucionar a un esquema que integre todo el alcance que el dinero debe tener en nuestra vida para brindar no sólo satisfacción de necesidades sino dar seguridad, protección, capacidad de multiplicar riqueza, posibilidad de mejorar el entorno, entre otros.
Aquí es donde una adecuada mentalidad para las finanzas personales empuja a adquirir el conocimiento necesario para enfocar el dinero de la mejor manera posible, en cada una de las zonas, de acuerdo a las propias circunstancias:
El patrimonio nos permite adquirir fortaleza para el presente y el futuro, con unos buenos activos (ahorros, fondos, inmuebles, etc.) que deben tener el balance de rentabilidad y de seguridad que más le acomode a cada uno.
El gasto marca la calidad de vida pero hay que saber dominar para disfrutar sin el riesgo de desequilibrarse.
El crédito, bien utilizado, puede ser una excelente apoyo para crear el propio patrimonio y para organizar los flujos del gasto.
La prevención, donde entran los seguros y otras previsiones, como los testamentos, es indispensable para proteger los propios planes y a la gente que más quiere uno
Las contribuciones al entorno permiten un balance con las personas y las instituciones que nos rodean, desde ayudas y donativos hasta un adecuado manejo fiscal.
Suéltalo
Suzie Orman, renombrada experta de finanzas personales, cuenta la anécdota de que en un viaje a un pueblo mexicano le llamó la atención ver a unos pericos en venta que estaban tranquilamente agarrados de un palito sin escaparse.
Al preguntar al vendedor cual era la razón por la cual éstos no volaban, le respondió que desde chicos los había enseñado a aferrarse a ese palo mientras estaban en la jaula y que ya crecidos, aunque los sacara de la jaula, los pericos continuaban sintiendo que su seguridad estaba en seguir agarrados de ese tronco.
Lo mismo puede pasar cuando una persona basa su seguridad en su dinero: muy fácilmente quedará aferrado a él, perdiéndose de disfrutar otros aspectos maravillosos de la vida. Esto ocurre cuando se pierde la perspectiva de que el dinero es un medio y no un fin en sí mismo.
Está más que comprobado que quien sabe desprenderse generosamente del dinero para ayudar a otros, está creando en su cabeza una mentalidad de abundancia que lo dispone para recibir más. Por el contrario quien se vuelve avaro, necesariamente se irá contaminando de una mentalidad de escasez que trastornará su vida y la de los que lo rodean.
La mentalidad de saber soltar el dinero permite darle perspectiva a las pérdidas económicas o a las crisis financieras personales o colectivas, pues da la capacidad de entender que todas las economías tienen ciclos y que, por lo tanto, atravesar las zonas bajas no debe ser motivo de depresión o desesperación, sino que, por el contrario, se deber ver con la confianza de que se encontrará la forma de salir adelante.
Estas son las cinco claves del dinero, pero no basta con conocerlas, es necesario irlas arraigando poco a poco en nuestra mente hasta que tengamos realmente esa mentalidad adecuada para tener éxito con el dinero, no sólo para conseguirlo sino, lo que es más importante, para disfrutarlo equilibradamente.
Con información de Aristimuño Herrera & Asociados y Héctor Gonzalez Díaz-Barreiro. (Profesor del Tecnológico de Monterrey y coautor del libro Ponte vivo con tu Dinero)
Fuente: Banca y Negocios